16 de diciembre de 2011

LAS CIUDADES DEL FUTURO

La Comisión Europea ha publicado el informe sobre el futuro de las ciudades europeas en el horizonte 2020. En este informe se constata como Europa es una de las regiones más urbanizadas del mundo, siendo las ciudades europeas relativamente pequeñas, lo que se refleja en el dato de que sólo el 7% de los europeos viven en una ciudad de más de cinco millones de habitantes.

Se conluye en este y otros estudios que la ciudad del futuro será una ciudad más densa en la que tendrán más presencia el urbanismo vertical, un urbanismo en el que el rascacielos ganará a la casa baja o al que denominamos como chalet adosado. Este tipo de urbanismo es medio ambientalmente más sostenible ya que requiere de menos recursos para la construcción de viviendas y genera un transporte más sostenible.

En este sentido, entiendo que mucha actividades económicas no industriales que se trasladaron a polígonos fuera del centro de las ciudades van a presentar a futuro una tendencia a volver al centro de las mismas, ya que su salida respondía únicamente a criterios económicos de precio del suelo, sin tener en cuenta otros criterios más lógicos como la huella ecológica de continuar urbanizando en los límites de las ciudades o las necesidades de transporte de las personas trabajadoras de dichas empresas.

Uno de los desafíos a los que se enfrentan las ciudades del futuro y las actuales, son las altas tasas de desempleo que van a desplazar a vivienda de baja renta a desmpleados generándose auténticos guetos en las ciudades, y más cuando se trata de personas de origen extranjero.

Por último, hay que apuntar el desafío que supone para muchas ciudades el que podríamos denominar como la gestión del “no éxito”. Somos espectadores de ciudades que pugnan por atraer investigadores, inversiones estatales o extranjeras, reconocimientos culturales, medio-ambientales, competiciones deportivas, etc. sin embargo existen un número muy importante de ciudades que o bien pierden en esa competición o bien no llegan ni siquiera a competir con otras. Estas últimas ciudades van a padecer crisis profundas en su devenir futuro y en algunos casos pérdidas de población significativas a las que tendrán que hacer frente.

Iñaki Elzaurdi (Equipo Prospektiker)